El Boliviano Digital constituye una propuesta de Moneda Digital del Banco Central (CBDC) que conserva las mismas características legales que el boliviano físico, contando con el respaldo pleno de la Autoridad Monetaria. Su concepción responde a la necesidad de disponer de un instrumento digital soberano que sea seguro, accesible y eficiente, y que al mismo tiempo pueda integrarse de manera completa al sistema de pagos nacional, aprovechando los avances en modernización que el país ha alcanzado durante las últimas décadas.
Se plantea que el Boliviano Digital sea emitido como un pasivo del Banco Central de Bolivia, garantizando su respaldo con la moneda nacional y manteniendo la confianza de los usuarios. No está diseñado para reemplazar al efectivo, sino para complementarlo, ampliando las opciones de medios de pago disponibles para la población y fortaleciendo la infraestructura financiera existente.
Primer Informe – Boliviano Digital
El Primer Informe del Boliviano Digital constituye una evaluación inicial sobre la viabilidad de implementar una Moneda Digital de Banco Central (CBDC) en Bolivia. El documento examina los avances alcanzados en la modernización del sistema de pagos nacional y analiza cómo un boliviano digital podría integrarse como complemento a la infraestructura ya existente, fortaleciendo la soberanía monetaria y la estabilidad financiera.
El Banco Central de Bolivia subraya que la publicación de este informe no implica una decisión definitiva sobre la emisión de un boliviano digital. Más bien, busca abrir un proceso de diálogo y consulta con actores del sistema financiero, instituciones públicas, sector privado, academia y la ciudadanía en general, con el fin de recoger aportes que permitan enriquecer el análisis.
De esta manera, el documento se constituye en un primer paso estratégico que posiciona a Bolivia en la agenda internacional de exploración de monedas digitales de bancos centrales, destacando que cualquier decisión futura deberá ser gradual, basada en evidencia y acompañada de un amplio proceso de socialización y participación ciudadana.
Una Moneda Digital de Banco Central (CBDC) es una forma de dinero emitida directamente por la autoridad monetaria de un país, en este caso el Banco Central de Bolivia, en formato digital. Se trata de un pasivo del Banco Central con el mismo valor y respaldo que la moneda física tradicional, pero diseñado para funcionar en entornos digitales. Su objetivo es complementar los medios de pago existentes, facilitando transacciones más seguras, rápidas y eficientes, sin sustituir al efectivo.
No. El efectivo seguirá circulando como medio de pago de curso legal en Bolivia y mantendrá su rol esencial en la economía, especialmente en zonas rurales y en transacciones donde el uso de dinero físico sigue siendo predominante. El Boliviano Digital se concibe como un instrumento complementario al billete y la moneda, que amplía las alternativas de uso y contribuye a la modernización del sistema de pagos. Su coexistencia con el efectivo garantizará que la población conserve la libertad de elegir entre distintos medios, mientras se fomenta gradualmente la adopción de soluciones digitales más seguras, rápidas y eficientes.
El Banco Central de Bolivia ha identificado que el avance de nuevas tecnologías de pago y la expansión de activos digitales privados plantean tanto oportunidades como riesgos. La evaluación de un Boliviano Digital responde al objetivo de fortalecer la soberanía monetaria, asegurando que la moneda nacional siga siendo el referente principal en la economía. Al mismo tiempo, busca modernizar el sistema de pagos de alto valor, agilizando la liquidación de operaciones financieras y facilitando la gestión de liquidez entre entidades. Otros propósitos incluyen reducir costos asociados a la emisión física de efectivo, promover mayor innovación en los servicios financieros y explorar soluciones más seguras y rápidas para pagos transfronterizos, un área donde Bolivia enfrenta aún altos costos y tiempos de intermediación.
Entre los beneficios más relevantes se encuentra la optimización de la eficiencia operativa en las transacciones de alto valor, lo que permitiría un funcionamiento más ágil y seguro del sistema de pagos. También puede contribuir a impulsar la inclusión financiera, ofreciendo a sectores actualmente con menor acceso a servicios tradicionales la posibilidad de utilizar un medio digital confiable, que no necesariamente requiere una cuenta bancaria convencional. En el ámbito macroeconómico, un Boliviano Digital bien diseñado podría fortalecer los canales de transmisión de la política monetaria, mejorando la capacidad del Banco Central de gestionar la liquidez. Adicionalmente, permitiría reducir los costos logísticos relacionados con la impresión, transporte y custodia de billetes y monedas físicas, generando beneficios económicos sostenibles en el largo plazo.
No necesariamente. El hecho de que el Banco Central de Bolivia publique informes y lleve a cabo investigaciones sobre el tema no implica un compromiso inmediato de emisión. Se trata de un proceso de evaluación gradual y basada en evidencia, que incluye diagnósticos técnicos, consultas con distintos sectores, desarrollo de prototipos y pruebas piloto en entornos controlados. Solo después de estas etapas, y siempre que los resultados sean favorables y se cuente con el marco legal adecuado, se podría considerar la decisión de emitir un Boliviano Digital. En este sentido, el análisis actual constituye una fase exploratoria cuyo objetivo principal es comprender beneficios, riesgos y desafíos antes de adoptar cualquier medida definitiva.
La publicación del Primer Informe constituye un punto de partida dentro de un proceso más amplio de análisis y consulta. En la siguiente etapa, el Banco Central de Bolivia llevará adelante encuestas y mesas de trabajo con instituciones financieras, actores públicos y privados, así como con la academia y la ciudadanía, para recoger percepciones y aportes sobre el proyecto. Los resultados de este proceso se reflejarán en un segundo informe, que profundizará en los hallazgos técnicos, regulatorios y sociales. Posteriormente, se avanzará hacia el desarrollo de prototipos y pruebas piloto en entornos controlados, lo que permitirá evaluar de manera práctica la factibilidad del Boliviano Digital antes de tomar cualquier decisión definitiva respecto a su emisión.